Mostrando entradas con la etiqueta ribaforada. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta ribaforada. Mostrar todas las entradas

8.10.1980

Ribaforada, un territorio privilegiado para el relanzamiento industrial (1980)



Una serie de confluencias (un alcalde con poca formación pero mucha voluntad política; un secretario de Ayuntamiento muy cualificado y comprometido, Carlos Díez; un equipo de planeamiento vanguardista en muchos aspectos dirigido por una cabeza privilegiada, Mario Gaviria) hicieron que un pequeño pueblo de 3.000 habitantes de la Ribera navarra del Ebro fuese tal vez el primer pueblo rural en entender que el planeamiento urbanístico debía ser mucho más que unas alineaciones y ordenanzas de construcción. Debía aprovecharse la concentración de capacidades técnicas para hacer que aquel esfuerzo generase todo un Plan de Desarrollo Local. De forma que al par que las Normas Subsidiarias de Planeamiento, o como extensión de las mismas, se generaron otros documentos técnicos y de investigación aplicada.

Hoy el planemiento urbanístico ya no se denomina así en España, sino justamente Planes de Desarrollo. Además de las aportaciones teóricas que hicimos en aquella época, marcamos con la praxis un camino que otros siguieron después, y otros aún más tarde sistematizaron en leyes y manuales.
Tras mi participación en el equipo de planeamiento, el Ayuntamiento me encargó dos informes. 

El primero relacionado con la identidad, pues el municipio no tenía unas raíces identitarias claras, iglesias notables u otros monumentos como otros pueblos cercanos. Como históricamente no era atractivo, nadie lo había estudiado nunca, así que me encargaron construir una Historia del municipio, hasta donde pudiera llegar con el dinero del encargo, que sólo me permitía sobrevivir unos meses hurgando en los archivos municipales y sobre todo en los archivos de la Institución Príncipe de Viana de la Diputación Foral de Navarra, que luego además publicaría el folleto en su colección popular. La investigación me ayudó a conceptualizar mejor algunas ideas sobre el papel del regadío en los procesos de modernización y urbanización.

El segundo fue la elaboración de un documento para "vender" el municipio a los inversores. Con la llegada de la General Motors el corredor del Ebro se apostaba como un espacio de futuro (en un marco general de crisis económica) pero en Ribaforada quisieron adelantarse "vendiendo" ese futuro. Había que trabajar también con medios muy limitados, tanto que los mapas y esquemas me los tuve que dibujar yo mismo. Y por supuesto, no había para libritos en papel couché: fotocopias con el lomo encolado y a correr.

Con la entrada en Europa y la llegada de fondos Leader, Proder, etc., este tipo de documentos se han hecho habituales en nuestros pueblos y pequeñas ciudades, imitando a las siempre diré que mal denominadas "ciudades globales". Pero en 1980 pocos pueblos rurales, si es que había alguno, ponían en práctica eso que luego se llamó Planificación Estratégica Urbana. Faltaba mucho para "Barcelona 92", y en San Francisco desarrollaron su proceso de PEU entre 1982 y 1984. Y, lo digo muy en serio, ni Jordi Borja ni Manuel Castells pasaron por Ribaforada, no sé a qué se dedicarían entonces...Por su parte Sassen andaba si acaso (o aún ni eso) estudiando los talleres textiles de Nueva York, quizás ni había descubierto aún la obra de John Friedmann cuya terminología tomó prestada. De ahí que en 2008 el arquitecto José Miguel Fernández hablaba, en un trabajo recopilatorio de esos mega citados, de 25 años de planificación estratégica de ciudades, pero para esas fechas ya eran 28 de planificación estratégica de pueblos. 



"Se hace así pues necesario, a todas luces revisar los esquemas de funcionamiento de la industria, comenzando forzosamente por el de localización. Hace ya años que las grandes compañías multinacionales lo han visto de este modo, iniciando un proceso, todavía en curso, de diversificación espacial de sus inversiones y sobre todo de "huída" de los grandes centros hiperindustrializados (ejemplos como el de la Ford o la General Motors, con ser los más conocidos para el caso español, no son sino la punta de un iceberg mucho mayor.
En esta nueva línea de desarrollo,parece que son los espacios intermedios, y más aún los equidistantes entre varias metrópolis industriales, los preferidos para lasnuevas localizaciones.Y todo ésto de forma más acentuada cuando estos nuevos "espacios resultantes" (como son denominados en ocasiones por ser consecuencia en gran parte del trasiego de líneas de transporte de materiales,energía e información) están dotados de los recursos e infraestructuras necesarios, y además son accesibles. Accesibilidad que ha de medirse desde diversos puntos de vista: geográfica (transporte-comunicaciones), institucional y financieramente hablando. 

UN NUEVO TERRITORIO
Entre estos espacios intermedios es sin duda la zona occidental del Valle del Ebro uno de los más privilegiados de Europa en estos momentos. Eje de las comunicaciones entre Barcelona y Bilbao y, siempre a través de Zaragoza, con Madrid desde Barcelona y con Valencia desde Bilbao, forzosamente habían de ir surgiendo sobre este espacio toda una serie de infraestructuras de calidad precisas para esa comunicación económica entre esas cinco ciudades-punta de la economía y la industria españolas. La Ribera, el amplio corredor Zaragoza-Alagón-Gallur-Mallén-Cortes-Ribaforada-Tudela-Alfaro-Calahorra-Logroño (y que en opinión de algunos se extiende ya hasta Burgos), se resume y concentra hoy por hoy en el eje Zaragoza--Tudela. Es lo que hemos llamado un "espacio resultante", fruto de la comunicación entre los grandes centros de decisión. económica.Es un espacio no planeado, casi residual, que se ha convertido veinte años después del salto desarrollista en uno de los espacios más lujosos de Europa.Hace ya tiempo que las multinacionales y otras grandes empresas (Rohmm & Hass, SKF, Sanyo, Piher, Roca...) han ido descubriendo el valor del corredor del Ebro. Más recientemente, la hasta hace un año primera empresa del mundo, General Motors, ha elegido también dicho espacio para instalar una planta de montaje de automóviles con 10.000 trabajadores. A la G.M. le ha seguido su filial, la Fisher & Body , una en Zaragoza y la otra en Logroño. Veamos cómo ha surgido este territorio de calidad."


REFERENCIA:
Baigorri, A. (1980), Ribaforada: un territorio privilegiado para el relanzamiento industrial, Ayuntamiento de Ribaforada

2.27.1980

Ribaforada (1980)

Uno de los pocos "libros" míos que han tenido una segunda edición (bueno, también alguna de los libros-guía de Extremadura que escribí). La primera fue en 1980, la segunda (que ignoraba hasta que hoy he encontrado el folleto bien escaneado en un organismo de Navarra) en 1983. Fue un encargo del propio Ayuntamiento, para el que había trabajado en un equipo de planeamiento haciendo la revisión de las Normas Urbanísticas, y que se quedó muy contento con mi trabajo y también me encargó un librito para la promoción industrial del municipio. Así es como uno de Mallén, un pueblo cercano pero ya aragonés, se convirtió por un tiempo en el principal experto en un pueblo navarro.



Es a la vez mi primer (no sé si será único) libro de Historia, aunque la mayor parte es Historia Social. Me pasé varios meses subiendo a Pamplona, a los archivos de Navarra, como auténtica rata de biblioteca. Y creo que quedó un trabajito meritorio porque es sobre un pueblo que no tenía Historia, del que nadie se había ocupado todavía. Lo publicó la Diputacion Foral en una colección de folletos de cultura popular muy consumida en Navarra.

"INTRODUCCION

Advertencia. Casi de forma sistemática, Ribaforada aparece como de pasada, sin entidad alguna, en cuantos estudios sobre la Ribera, la zona de influencia del canal Imperial o el valle del Ebro en general, hemos consultado. Y ello es explicable, porque para el investigador no resulta atrayente un pueblo que, al menos en apariencia, no tiene historia. Sin unos archivos municipales minimamente válidos (más por culpa de inculturas pretéritas que por otras razones), sin archivos parroquiales, sin resto alguno de monumentos históricos, parece que nos encontremos ante un pueblo de nueva planta, o poco respetuoso con su historia. Y eso precisamente ha sido lo que ha animado nuestra curiosidad a la hora de hacer este breve estudio (que no pretende ser totalizador) sobre el pasado, el presente, e incluso el futuro que parece esperarle a Ribaforada. Estas páginas tan sólo son, pues, una pequeña ayuda para que el pueblo de Ribaforada redescubra su identidad, a través de un pasado que el continuado desarrollo local ha ido escondiendo, a través de un presente que las más de las veces las necesidades más urgentes impiden ver en toda su amplitud, y a través de un futuro que constituye una incógnita para todos.

Ribaforada y la Ribera. 

Cuando en esta misma colección significados estudiosos de la Ribera navarra del Ebro (Jimeno Jurío, Fernández Marco, etc.) han escrito sobre los más variados aspectos de este territorio, y, en otros lugares, otros autores (como Floristán Samanes) han profundizado sobre su estructura general hace ya lustros, resulta ocioso pretender apuntar nada nuevo sobre el territorio dentro del cual se inscribe Ribaforada.

Conviene, pues, desde un principio concretarnos a nuestro pueblo objeto de estudio. Es sin duda Ribaforada una de las poblaciones que con mayores derechos pueden ostentar el título de «ribera». En este pueblo no sólo confluyen todas las características generales de los pueblos riberos, sino que incluso se han abstraido para formar el nombre de la localidad, que creemos se deriva de dos antiguas voces: RIBA o RIVA, término de antiguo utilizado en Navarra para nombrar a los caminos-cajero que siguen el curso de los canales, cequiones o ríos, y la desaparecida voz FORADA Ó FORAIDA, usada para designar una hondonada en términos generales. Es la interpretación que creemos más razonable del nombre del pueblo, si tenemos en cuenta su situación. Ribaforada se halla asentada justo en el borde de la última terraza aluvial del Ebro, a unos 10 ó 15 metros sobre el curso de éste. Si desde la parte norte del pueblo observamos el paisaje, nos encontraremos con la «hondonada» o «foraida»: la espléndida y verde vega baja del Ebro; la hoya limitada en este punto al norte por la Bardena y al sur por los carasoles y montes de Ribaforada...."