11.30.1988

Aunque no lo creas, el Guadiana pasa por Badajoz (1988)



"   Aunque a este río se le debe casi todo, el crecimiento de Badajoz se ha hecho durante siglos de espaldas al Guadiana, un río peligroso, con tremendas inundaciones periódicas que aún hoy amenazan a algunos barrios.Sin embargo, a lo largo del siglo XX con la regulación del río y sus afluentes se ha venido reduciendo drásticamente la cota de máxima avenida. De forma que ha venido quedando un amplísimo cauce en el que cientos de familia humildes han hallado la tierra de nadie en la que autoconstruirse sus viviendas. En la mayoría de los casos la construcción de la vivienda venía acompañada de la ocupación de una pequeña parcela que, conquistada a las "miasmas" insalubres del río, pronto era plantada de frutales variados y todo tipo de hortalizas; unas cabezas de ganado que hallaban abundante y gratuito pasto en las orillas complementaban el cuadro de estas ocupaciones,que en ciertos casos han dado en convertirse en auténticos barrios (Moreras, Marchiviritos ... ).Aguas arriba de la ciudad, sus aguas derivadas por canales partieron latifundios, con acequias como cuchillos que son vanguardia de la igualdad, dando tierra y pan a muchos miles de jornaleros extremeños. En la misma ciudad, el Guadiana ayudó a Badajoz a fortificarse; le ha dado grandes espacios libres, verdes y hermosos; le dió los primeros kilowatios que alumbraron sus calles; le dióplayas cuando no había piscinas; y aún hoy calma su sed en periodos de sequía, y mitiga la tristeza y el aburrimiento de los que menos tienen con su abundante -aunque cada vez menos- pesca. El Guadiana es sin duda, y en mayor medida que ningún otro en España, el río de los desposeídos, un río popular como ningún otro.Es razonable pues que, de una vez por todas, las gentes que habitamos esta ciudad decidamos llegar a un acuerdo con el río, dejar de volverle las espaldas como avergonzados. Hasta tal punto parecemos avergonzados que, cuando ya llevamos tres puentes construídos para pasar sobre él, aún no hemos construido ni una sola escalinata que permita a abuelos y niños bajar a pasear por sus orillas. lCuántos puentes deberemos cruzar sobre el Guadiana para damos cuenta de lo que hay bajo los puentes?. Aunque ahora mismo casi únicamente hay suciedad y desidia.  "

REFERENCIA
Baigorri, A. (1988), "Aunque no lo creas, el Guadiana pasa por Badajoz", Machas, Num 16, pp. 18-19
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9.22.1988

Un programa para el rústico metropolitano (1988)



Ponencia invitada en el Coloquio Hispano Francés sobre Agricultura Periurbana organizado por la casa de Velázquez y el Ministerio de Agricultura. Madrid, 1987

"      La aparición de fenómenos nuevos en la periferia de las ciudades, como los huertos clandestinos, ha conducido a que la Administración haya prestado una mayor atención (aunque todavía escasa) a lo que ocurre más allá de los muros de las grandes ciudades, en ese espacio, vacío imperfecto, que ni es ciudad ni es exactamente campo.
 
En la ponencia se recogen algunas experiencias personales del autor sobre el tema y se sintetizan sus propuestas para el estudio «Problemas y posibilidades de la agricultura periurbana en el Area Metropolitana de Madrid», realizado con Mario Gaviria y algunos colaboradores entre 1983 y 1984 por encargo de la Consejería de Urbanismo y Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid. 
Entre las políticas de protección física del suelo fértil se propone un cambio de actitud de los urbanistas hacia el llamado Suelo no Urbanizable, aplicación de policía urbanística, recuperación de suelos degradados mediante el reciclaje de los residuos sólidos urbanos. Entre las políticas de mejora ambiental y paisajística se plantea el tratamiento y recuperación de escombreras y vertederos clandestinos, la repoblación forestal dispersa y la repoblación demográfica mediante la creación de poblados para jóvenes. 
Finalmente, entre las políticas de fomento agrícola se propone un completo programa de desarrollo de huertos metropolitanos (de ocio y recreo, de ayuda a la subsistencia y lotes de regeneración forestal), y se hace un repaso de los dos frenos más importantes que hoy impiden un desarrollo armónico del rústico metropolitano: la inadecuada gestión del agua, que está acabando con los regadíos, y la retrógrada estructura de la propiedad. Se proponen diversas actuaciones para superar estos dos poderosos obstáculos, planteando la transformación de entre 25 y 40.000 ha de nuevos regadíos."



REFERENCIA

Baigorri, A., (1988), "Un programa para el rústico metropolitano", en F.Fourneau y C.Gómez, eds., Agricultura periurbana / Agriculture Periurbaine, Ed. Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación/ Casa de Velazquez, Madrid, 383-398

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